El pasado 22 de julio tuvo lugar la presentación de la documentación del Plan de Singular Interés (PSI) al Gobierno de Castilla-La Mancha para la construcción del parque ToroVerde Cuenca, un paso de gran importancia para hacer realidad el proyecto ecoturístico impulsado por la empresa puertorriqueña ToroVerde Parks, que se desarrollará en la Serranía de Cuenca y que se ha convertido en una de las iniciativas más ambiciosas de la región en materia de turismo y sostenibilidad. El acto tuvo lugar en el Palacio de Fuensalida de Toledo y estuvo presidido por el presidente regional, Emiliano García-Page.
Este proyecto tiene una inversión estimada de más de 90 millones de euros en su primera fase y ha sido declarado de interés regional por parte del Gobierno de Castilla-La Mancha, favoreciendo su gestión administrativa gracias a su destacada importancia estratégica. El proyecto ocupará más de 1.000 hectáreas distribuidas entre los municipios de Cuenca, Mariana y Sotos, ubicado a 15 kilómetros de la capital conquense y con buena conexión con Madrid.
El diseño del parque combina experiencias de aventura al aire libre con alojamientos tipo glamping, zonas temáticas centradas en la biodiversidad, la cultura local y la gastronomía, y espacios recreativos. El proyecto incluye la construcción de tirolinas de gran tamaño, senderos naturales, zonas de salto, plataformas panorámicas, circuitos de bicicletas en altura y un conjunto hotelero de alta gama operado por la cadena internacional Nayara Resorts. Estas instalaciones se integrarán en el entorno mediante soluciones de bajo impacto ambiental, con uso de energías renovables, movilidad interna sostenible y sistemas hídricos eficientes.
Uno de los elementos más destacados del proyecto es su capacidad de generar empleo en una zona con importantes retos demográficos. Durante el acto de presentación institucional celebrado en el Palacio de Fuensalida, quedó indicado que el parque ToroVerde supondrá la creación de alrededor de 300 puestos de trabajo directos, además de un número significativo de empleos indirectos derivados de la construcción, mantenimiento y servicios de actividad turística. Se estima que una vez en funcionamiento es posible que el parque reciba cientos de miles de visitantes al año, lo que permitirá dinamizar sectores económicos como la hostelería, el comercio local y el transporte.
Además del volumen de inversión o la innovación en sus infraestructuras, la propuesta de ToroVerde también destaca en el enfoque integral de desarrollo que plantea. La empresa ha diseñado el parque como un destino sostenible, con una finalidad educativa y orientada al ocio activo cuidando del entorno natural. La utilización de tecnologías aplicadas a la sostenibilidad, el diseño adaptado y la colaboración con proveedores locales configuran un modelo que combina rentabilidad económica con responsabilidad ambiental y social.
El Gobierno de Castilla-La Mancha ha respaldado el proyecto desde su inicio como una oportunidad para reforzar la oferta turística regional y posicionarla en el ámbito internacional. El crecimiento sostenido del sector turístico en la comunidad autónoma genera un contexto favorable para la implantación de proyectos como el de ToroVerde, capaces de atraer nuevos perfiles de visitantes y ampliar los beneficios económicos más allá de los destinos tradicionales.
En definitiva, ToroVerde representa un ejemplo de inversión estructurada con una planificación sostenible y visión a largo plazo. El parque es ya un referente en el ámbito del ecoturismo y es un elemento clave para el desarrollo de la Serranía de Cuenca. Su consolidación en los próximos años podría abrir la puerta a nuevas formas de turismo rural, activo y sostenible, favoreciendo el equilibrio entre desarrollo económico y protección ambiental.